Este verano, ocurrió un accidente, realmente, lamentable. Álvaro Ugaz, el reconocido periodista, falleció en un accidente automovilístico en la panamericana sur, regresando de Asia luego de una amena "juerga". Él, como muchos otros, cometió un error, manejó en estado de ebriedad y murió inmediatamente. Los medios de comunicación, como siempre, presentaron sus respectivos reportajes del caso. Sin embargo, un telón oscuro pretendía ocultar la realidad del accidente, y querían culpar a otros, solo por no manchar la imagen del reconocido periodista y gran humano Álvaro. Realmente, es una pena que los medios de comunicación intente dar una información poco veraz al público, puesto que si hubieran mostrado, desde un principio, los verdaderos motivos del accidente podrían haber colaborado con la sociedad enviando un buen mensaje a la audiencia. Es decir, un mensaje real que indica que nadie se salva de un accidente, así seas el mejor ser humano del mundo, cuando actúas con irresponsabilidad. Finalmente, nuestros actos arman nuestro destino, y este lamentable accidente lo demuestra.
¡NO MAS IRRESPONSABILIDADES! ¡POR EL BIEN DE NOSOTROS MISMOS!
LAMENTABLE
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